El brandy y el coñac son dos bebidas destiladas y elaboradas a base de vino. La gran mayoría de consumidores no saben distinguir un licor del otro. Para ayudaros en esta tarea, hoy os enseñamos sus principales diferencias:

  1. El brandy es de origen más antiguo que el coñac, cuyo nombre se debe a la región gala donde se produce. En cambio, el primero deriva del término “brandenwijn”, vocablo holandés que significa aguardiente del vino. Se cree que este licor nació en el s. X en Italia para, siglos más tarde, popularizarse en el resto de Europa.
  2. Aunque la elaboración de sendos destilados sea bastante similar, el proceso de crianza o envejecimiento del brandy suele realizarse en soleras y criaderas. Este sistema consiste en el uso de barricas de roble americano, denominadas botas, que se le alinean en diferentes alturas. Periódicamente se extrae un porcentaje del contenido de cada una de las botas para rellenar otras, mezclando el contenido con diferente nivel de envejecimiento.
  3. Otro rasgo diferenciador es que el coñac se elabora exclusivamente con cepas blancas mientras que en el brandy se pueden utilizar tanto tintas como blancas
  4. En 1909 el término coñac se convirtió en una denominación de origen registrada que limita la producción a una región concreta de Francia y que establece una línea de actuación, desde su producción hasta su comercialización, que preserva la identidad de esta bebida.

 

Categorías: Brandy

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