La Navidad ya está aquí y en estas fechas se acumulan las comidas familiares. Para muchos de nosotros son los ágapes más importantes del año, y queremos que todo salga bien: preparamos hasta el más mínimo detalle cada plato, la colocación de la mesa, la cubertería, etc. Y, cómo no, el vino debe estar a la altura. Hemos preparado algunas ideas con las que no fallarás aunque, como siempre, escoge según tus gustos y tu propia experiencia.
Aperitivo
Los invitados ya han llegado, y estamos todos hambrientos, por lo que presentarles algo especial resulta siempre agradable. Los aperitivos son la excusa perfecta para empezar a degustar algún vino espumoso, ya que es un tipo de vino realmente versátil que encaja perfectamente bien con la mayoría de los alimentos que puedas presentar ahora.
- Para un presupuesto ajustado: Freixenet Brut Barroco
- Algo especial: Pierre Paillard Les Parecelles
- Algo extra especial: De Sousa Cuvée Des Caudalies Millésime 2006
Primero
De nuevo este plato puede variar de un hogar a otro, pero por lo general será un plato con más sustancia que el aperitivo, aunque más ligero que el que le sigue. Algunas personas sirven langosta, gambones u otro tipo de mariscos. Otros prefieren sopa. Nos gusta sugerir un vino blanco de medio cuerpo aquí. Nuestro favorito es un Chardonnay envejecido en barrica, lleno de un cremoso sabor y que combinará muy bien con este tipo de alimentos.
- Para un presupuesto ajustado: Torres Atrium Chardonnay
- Algo especial: Lake’s Folly Chardonnay 2001
- Algo extra especial: Enate Uno Chardonnay 2011
Plato principal
¿Guiso de pescado? ¿carne estofada? Hay algunas decisiones que afectarán a la elección del vino en este punto. Algunas personas inevitablemente quieren continuar con un vino blanco, y eso está bien: el Chardonnay en barrica anterior se ajusta bien a casi cualquier tipo de plato de pescado que puedas preparar. Sin embargo, necesitarás un vino tinto si cocinas una carne potente. A este plato le podría acompañar un buen Burdeos, un robusto Priorat o una Rioja Reserva. Todas son grandes opciones, y ni tú ni tus invitados os sentiréis decepcionados. Teniendo en cuenta que a menudo son los acompañamientos los que más se destacan en la cena de Navidad – piensa en la salsa de arándanos – recomendamos experimentar con un Pinot Noir o Beaujolais Cru en su lugar. Se trata de vinos versátiles, con sabores complementarios y amados por sommeliers en todo el mundo por su versatilidad. Los invitados quizá pueden inicialmente quejarse de que es un vino «ligero», pero pronto se sorprenderán gratamente.
- Para un presupuesto ajustado: Enrique Mendoza Pinot Noir
- Algo especial: Marcel Lapierre Morgon
- Algo extra especial: Acusp
Postre
Hay infinidad de postres que podemos comer en Navidad, pero seguro que todos van a ser ricos, cremosos y dulces. Tales sabores claman por un vino dulce como un jerez dulce o un delicioso Sauternes.
- Para un presupuesto ajustado: Alvear Pedro Ximénez 1927
- Algo especial: Château Suduiraut 2004
- Algo más especial: Château d’Yquem 2006